Una deslumbrante aparición

 

1554 es el año de la aparición de La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, en tres ediciones: la de Burgos, por Juan de Junta; la de Alcalá de Henares por Salcedo y la de Amberes por Martín Nucio. Parecería que hubo una anterior que se ha perdido.

Acerca de la fecha de composición, la obra informa en el Tratado I dos datos: la batalla de Gelves (hay dos, en 1510 y 1520) y las Cortes de Toledo, también en dos oportunidades, 1525 y 1538-39. Marcel Bataillon, quien más eruditamente ha tratado el tema, se inclinó después de sostener otra posición, a creer que fue compuesto alrededor de 1550. (La vie de Lazarillo de Tormes, Paris, 1958.) A esta conclusión contribuye otro dato fechable que se rastrea en el Tratado III: "el mal año en que Lázaro sirve al escudero de Toledo, cuando "acordaron (en) el Ayuntamiento que todos los pobres extranjeros se fuesen de la ciudad". Bataillon y Márquez opinan que ese período de escasez es el calamitoso decenio de 1540 a 1550".) ("Lazarillo de Tormes", por Pedro M. Piñeiro, en Historia y crítica de la literatura española, al cuidado de F. Rico T. II, Barcelona, Ed. Crítica, 1980).

El autor de Lazarillo ocultó, prudentemente, su nombre. Américo Castro señaló, inobjetablemente, que "el autobiografismo es solidario de la anonimia". Y no se han realizado más que conjeturas acerca de su identidad: Fray Juan de Ortega, Diego Hurtado de Mendoza, Juan de Valdés, Sebastián de Horozco, son algunas de las atribuciones que han tenido mayor predicamento.

Además de las antecedentes generales señalados para la picaresca en el capítulo "Marco histórico" se deben destacar las fuentes folklóricas del Lazarillo. Afirma Marcel Bataillon, quien expuso largamente acerca de este tema, que las bases folklóricas son mayores en el Tratado I que en los siguientes. María Rosa Lida quien discrepa con la importancia que le da Bataillon, afirma incontrovertiblemente que "Lazarillo como mozo de ciego nace del libro, como también nace del libro el recuerdo de sus travesuras y sus muchos amos."( "Función del cuento popular en el Lazarillo de Tormes", en "Actas del Primer Congreso Internacional de Hispanistas". Oxford, 1964).

El éxito de esta pequeña novela fue inmediato, tanto a nivel popular rconociéndose en lo sucesivo al personaje como nombre de acompañante de ciego, como a nivel de escritores que lo consideran en sus obras. Cervantes en El Quijote de 1605 lo sobreentiende como una obra referencial: "Mal año para Lazarillo de Tormes", desafía su personaje Ginés de Pasamonte. "Fue el libro de todos -dice Julio Cejador y Frauca- de la gente letrada y de la gente lega, de eclesiásticos y seglares, del pueblo bajo y de las personas de cuenta." ("Introducción" a la edición de Clásicos castellanos, Madrid, Espasa Calpe, 1962.)

La razón además de literaria, es que el desconocido autor se identificó con su personaje y sintió que siendo pobre tenía derechos, que no teniendo padres nobles tenía derechos, que no estando de acuerdo con la religión dominante seguía siendo hombre y escribió esta oración que es toda una conmoción no sólo en la historia de la literatura, sino del pensamiento:

"Pues sepa vuestra merced, ante todas cosas, que a mi me llaman Lázaro de Tormes".

Laconciencia de su audacia le hizo elegir un nombre con resonancias bíblicas para el personaje y el anonimato para sí mismo. Fue el primero en declarar, al menos en una obra literaria, la dignidad del hombre en toda su amplitud.

 

(fragmento del prólogo de Leonrado Garet)

       
 

 

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